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Una mirada hacia la educación Online

Mtro. Juan Pablo Ruiz Huerta · Profesor del Departamento de Ciencias Económico Administrativas (CEA) y el Centro de Lenguas Extranjeras (CELE), UNIVA Guadalajara

 

En los últimos años, la educación online ha experimentado un crecimiento exponencial y se ha convertido en una parte fundamental del ecosistema educativo. La propagación de tecnologías de la información y comunicación permitió una transición significativa en la forma en que los estudiantes acceden al conocimiento y son partícipes en los procesos de aprendizaje. No obstante, es importante realizar un análisis crítico y objetivo de esta transformación, considerando las ventajas y desafíos que ofrece dicha modalidad.

Un aspecto positivo de la educación digital y virtual es su basta capacidad para brindar acceso a la educación a personas que cuentan con muchas limitaciones socioeconómicas, es decir, a través de la educación en línea, muchos estudiantes tienen la oportunidad de acceder a recursos educativos desde cualquier punto del planeta, mismo que facilita y amplía las posibilidades para aquellos estudiantes que por diversas razones no pueden tener acceso a una educación presencial. Por consiguiente, la educación online ofrece una amplia flexibilidad en términos de tiempo y horarios, otorgando permisividad a los estudiantes de adaptar su proceso de enseñanza-aprendizaje a las propias necesidades y responsabilidades diarias.

Otro aspecto destacable es la diversidad de herramientas disponibles en estos dos tipos de educación. Las plataformas virtuales brindan una amplia variedad de recursos interactivos, como audios, actividades prácticas y videos, mismos que fortalecen la experiencia del aprendizaje. Todas estas herramientas tienen la capacidad de desarrollar la participación activa de los estudiantes, impulsando la creatividad individual para ofrecer un aprendizaje dinámico.

Además, la educación en línea cuenta con un potencial de gran alcance para promover el desarrollo de habilidades digitales y tecnológicas que son de suma importancia en el ámbito pospandémico laboral actual. Los estudiantes que forman parte de este ecosistema educativo tienen la capacidad de adquirir competencias en el correcto uso de tecnologías de la información y herramientas digitales, mismas que resultan en un beneficio inconmensurable para su futuro académico, personal y profesional, ya que estas tecnologías de la información son parte fundamental en muchos ámbitos sociales y no solo en la educación.

Sin embargo, existen también ciertas críticas importantes que no se pueden pasar de lado. En primer lugar, se ha discutido cómo la falta de interacción social puede tener un efecto negativo en el correcto desarrollo de habilidades de comunicación y trabajo en equipo de los estudiantes. Y, aunque esta modalidad todavía nos plantea grandes desafíos en términos de equidad, igualdad y oportunidad de acceso, no deja de ser una gran opción y solución para muchos.

En cuestión de accesibilidad, la educación digital y virtual ha innovado nuevas oportunidades para tener acceso a la educación, beneficiándose las regiones remotas. Estos tipos de educación contribuyen a eliminar las barreras geográficas, permitiendo a los estudiantes el acceso a una fuerte infraestructura de cursos y materiales interactivos, lo que ha amplificado el alcance que tiene la educación. Sin embargo, es de suma importancia tomar en cuenta y trabajar en resarcir la falta de accesibilidad a dispositivos electrónicos y a una conexión de internet estable que aún se presenta en muchas regiones.

Hablando en un contexto de calidad educativa, la educación digital y virtual promueve la participación activa de los estudiantes y el aprendizaje autónomo, es decir, que a través de plataformas en línea los estudiantes son capaces de acceder a una amplia variedad de recursos educativos, contribuyendo a que estos sean capaces de aprender a su propio ritmo y analizar con cautela y detenimiento los temas que les interesan. Además, la educación virtual ha sido pionera en la colaboración y facilitación del intercambio de profesores y estudiantes de diferentes contextos. Sin embargo, hay una preocupación latente sobre la comparación de la educación tradicional con la educación digital y virtual, la falta de interacción con compañeros y profesores puede influir negativamente en el proceso de aprendizaje de los estudiantes, otra dificultad no menos importante es la evaluación en estos ambientes virtuales, ya que requiere desafíos adicionales de parte de estudiantes y profesores, mismos que siendo agentes activos de este proceso deben de adoptar tendencias y habilidades tecnológicas que permitirán el correcto uso y desarrollo de estos dos tipos de educación que cada vez están convirtiéndose en pilares de los modelos educativos y se volvieron parte fundamental en este ámbito.

Todos los estudiantes agentes de la educación en línea adquieren habilidades digitales que se pueden aplicar en diversos campos. Estas habilidades son de suma relevancia en el mundo académico, laboral y social y proporcionan una enorme ventaja en términos de empleabilidad. Sin embargo, es primordial encontrar un equilibrio entre el desarrollo y uso de las tecnologías de la información y el fortalecimiento de las competencias socioemocionales que muchos de nosotros olvidamos con la pandemia.

Finalmente, podemos observar que la educación digital y virtual es un fenómeno que ha causado intercambio de puntos de vista y discusiones en los últimos años, es cierto que estas herramientas dan infinitas posibilidades de acceso a la educación, pero a su vez es importante conocer sus desafíos; la educación online requiere autodirección, constancia y disciplina para lograr el éxito. En última instancia y como se ha mencionado anteriormente, la contribución de la educación digital y virtual es muy significativa en el ambiente educativo y sirve para garantizar que todos los estudiantes tengan igualdad de oportunidades de acceso a la educación, al aprovechar de manera efectiva las posibilidades que ofrecen estas plataformas consolidamos que la educación logre ser equitativa, inclusiva y con un sentido de calidad para todos los estudiantes.

 

Referencias

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