La Responsabilidad Social desde las Universidades

Dra. Julia P. Samperio Casco · Docente y Profesora Líder del Centro de Competitividad y Emprendimiento Sostenible, UNIVA Guadalajara.

Las casas de estudio han sido tradicionalmente un eje rector de la sociedad, en principio por construir comunidad y por la generación del nuevo conocimiento a través de la academia y la investigación, sin embargo, poco a poco han diversificado su quehacer, generando involucramiento con las distintas hélices representadas por gobierno, empresa y organizaciones de la sociedad civil, esto con el objetivo promover el desarrollo económico y social, mediante un esquema de planificación estratégica de largo plazo (Lavín, 2014).

Al pasar del tiempo, las universidades han asumido un rol aún más importante al formar estudiantes para la vida, no solo profesional, sino también personal, a través de la educación por competencias, un modelo que involucra al conocimiento, las habilidades y los valores en una integralidad que permite el desarrollo de la persona en primera instancia para poder reconocerse y reconocer al otro como parte complementaria de la realidad que se vive.

Al notar la otredad, considerada como la responsabilidad por los demás (Levinas, 1974) de inmediato se comienza a construir el nosotros, incluyendo al entorno y priorizando el beneficio mutuo en todas las acciones.

Al llegar a reconocer que la individualidad no es el centro, sino que es solamente una parte importante de un todo, comienza a existir la corresponsabilidad; misma que requiere un proceso formativo que, generalmente, otorgan las universidades a través de la Responsabilidad Social Universitaria, el eje del que algunas casas de estudio se han apropiado para dar adelante con iniciativas que permiten a la comunidad universitaria involucrarse y apoyar a la sociedad a construir un mundo mejor en muchos sentidos.

Las universidades aplican la Responsabilidad Social a través del reconocimiento de las necesidades de las otras personas y del entorno, generando acciones que permiten crear un impacto positivo para la creación de mejores sociedades con más oportunidades y con la formación de profesionistas más capaces, más estratégicos, pero, sobre todo más humanos que repliquen el hecho de que las universidades son una fuerza que ha sido creada para el bien.

Si gustas profundizar en el tema, te comparto las siguientes referencias:

• Lavín Verástegui, Jesús, & Castillo Hernández, Lázaro, & Pedraza Melo, Norma Angélica (2014). La gestión de la triple hélice: fortaleciendo las relaciones entre la universidad, empresa, gobierno. Multiciencias. Recuperado de: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=90433839002
• Levinas, E. (1974). Autrement qu’être ou au-delà de l’essence. La Haya: Martinus Nijh