Mtra. Laura O. Robles Sahagún · Coordinadora de Alumni y Bolsa de Trabajo UNIVA
Se llegó la fecha en que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CONASAMI) anuncia el incremento salarial para el siguiente año. Para el 2021 se determina que aumentará 15% el salario mínimo que pasa de $123.22 a $141.70 para la generalidad del país; mientras que en la Zona Libre de la Frontera Norte pasa de $185.56 a $213.39. Sin duda alguna, esta administración pública federal pasará a la historia como la que más a incrementado el ingreso de los trabajadores.
No olvidemos que la CONASAMI es un organismo público descentralizado cuya función es fijar los salarios mínimos legales de forma congruente entre lo que establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos con las condiciones económicas y sociales del país.
Esta noticia tiene una lectura desde varios frentes. Si revisamos la información oficial emitida desde el Gobierno se habla de todas las ventajas que tienen los trabajadores y sus familias con estos aumentos, incluso en la página web tratan de desmitificar varios puntos como que se generará más desempleo o que se elevará el costo de la canasta básica.
Si buscamos el frente patronal, hay quienes dicen que votaron en contra, el gobierno dice que “se aprobó por mayoría”; la COPARMEX ha sido muy clara en su postura y si bien es cierto que han sido parte fundamental para que, en los últimos años, el salario mínimo se recupere, también lo es que la situación económica de este año en nuestro país es aun más compleja y esto se refleja en los más de un millón cien mil empleos perdidos. Por ello la Confederación precisa que la responsabilidad salarial debería ser compartida entre las empresas y el gobierno.
La propuesta realizada por COPARMEX no fue aprobada, una muestra más de la sordera, la ceguera y la poca sensibilidad del gobierno hacia el sector empresarial que, afirma, si se perderán empleos por el cierre de negocios que no puedan soportar la situación económica por la pandemia, además auguran un retraso importante en la recuperación de la economía nacional.
El incremento del salario mínimo no solo es para los que perciben esa cantidad, sino que el tabulador general de profesiones y oficios también se ajustan. Recordemos que existe una tabla que marca cuánto debe ganar, por lo menos, las personas que realizan actividad profesional u oficios.
Qué bueno sería que el salario mínimo fuera mucho mayor para todos los trabajadores. Que bueno sería que los empresarios pudieran pagarlos y que esto no se viera reflejado en los precios finales de los productos y los servicios. Que bueno sería que el Gobierno se solidarizara con los empleadores y más en una situación como la que actualmente vive México. Por eso hoy en día hay gente que dice: “que conserve mi trabajo, aunque no me aumenten el salario”.
Recordemos que el Gobierno no es el generador de empleos, los empresarios son los que los crean, mantienen y acrecientan.
Publicado en La Crónica de Hoy Jalisco del viernes, 18 de diciembre de 2020.