En esta fiesta de los Santos Arcángeles, Miguel, Gabriel y Rafael, la Iglesia nos invita a contemplar su actuar dentro de la historia de salvación. Sin duda alguna, su intercesión por cada uno de nosotros ha sido de suma importancia, ya que Dios tiene muchas formas de hablarnos y acompañarnos. Dios se comunica a través de los ángeles, que son mensajeros para nosotros.
Vemos cómo dentro de la sagrada escritura cada arcángel tiene una tarea muy particular: Gabriel, el que invita a María a sumarse al proyecto siendo la madre de Dios, Rafael es compañero de camino que allana las cosas y Miguel es el que en un mundo azotado por el mal se le enfrenta y lo vence. Hoy es oportuno encomendarnos a su auxilio y acompañamiento, siendo conscientes de que no vamos por esta vida solos, sino que Dios va a nuestro lado otorgándonos una compañía que es siempre incondicional.
