El buen trato en las relaciones interpersonales es fundamental para el buen funcionamiento de la sociedad. El evangelio de hoy es una invitación a vivir un ambiente de paz y fraternidad con aquellos que nos rodean. Es la regla de oro que incluso es aceptada y vivida fuera del cristianismo, pero debemos de tener cuidado de no caer en la ley por la ley, es decir, “ojo por ojo, diente por diente”, sino llevar a cabo la ley del amor; a través de esta ley podemos tomar el camino que nos lleva a tener vida en abundancia, vida en la verdad.
Pidamos a Dios la gracia de estar siempre en su amor, para que desde esta postura sea todo nuestro ser y quehacer de todos nuestros días. Ofrezcamos todas nuestras actividades por todas aquellas personas que tratan de forma equivocada a los demás, para que Dios toque su corazón.