En el evangelio de hoy, nos muestra la escena en donde el apóstol Andrés es llamado y esto, ¿A qué se debe? Pues porque estamos festejando a San Andrés, este hombre que era pescador y que se dejó inundar por el llamado de Jesús y decidió atenderlo por el mismo amor.
Cabe resaltar dos cosas, una es que Andrés se mantuvo en la espera de la llegada del Mesías, de manera muy prudente y en vela. Y la otra es que Andrés no se detuvo en escusas o pretextos, por no ser un erudito, por no tener reconocimientos o fama.
Pidamos la intercesión de San Andrés para que nos ayude a seguir a Jesús de cerca, que con su ejemplo podamos dejar que el Espíritu Santo actúe en nosotros y podamos seguir construyendo la nuestra Iglesia de manera muy entregada.