Tarde te amé… te buscaba fuera y estabas dentro de mí (San Agustín)
Este día en la Iglesia recordamos un gran hombre y una gran historia, la de San Agustín. Muchas cosas se podrían decir, pero para no hacer largo este cafecito me gustaría resaltar un aspecto clave de su vida: san Agustín fue un incansable buscador de la verdad. Él buscaba en la filosofía, la ciencia y las religiones de su tiempo, el fin último de su vida. Cuando después de muchos años se encuentra con la verdad del Evangelio, más cuando se dejó encontrar por Jesús, descubrió que lo que buscaba incansablemente fuera estaba dentro de él.
Esto nos enseña que, aunque vivimos en medio de un mundo tan superficial, la respuesta es escuchar y seguir la conciencia, es ahí donde Dios habla al corazón del hombre. Esta ha sido la experiencia de San Agustín y puede ser la de nosotros… que no se nos haga tarde para amar a Jesús. Disfruta tu café y ten un excelente día.