Laura Sofía Escobar Calixto • Alumna de la Licenciatura en Psicología en UNIVA Querétaro
El virus SARS-CoV-2 sigue siendo un tema de innovación tanto para la ciencia como para la sociedad. En el caso de la digitalización, esta ha venido a cambiar el mundo y la pandemia del coronavirus le ha venido acompañando desde el 2019. Actualmente el mundo se dirige a través de las TIC, una fuerza que ha crecido junto con la modernización, desde el celular que tenemos en la mano, hasta la computadora que utilizamos para lograr los estudios de los niños y la vida laboral de los adultos. La popularidad de las TIC ha hecho que su uso sea cada vez más precoz en las generaciones actuales, por lo que se ha visto un aumento de esa tecnología conforme ha transcurrido la pandemia, y con esto, ha llevado a estas generaciones a padecer ciertos cambios dentro de su desarrollo humano, especialmente el desarrollo del infante. Es por esto que durante este proceso académico se ha decidido llevar a cabo una investigación con el objetivo de buscar determinar la unión entre las TIC con el desarrollo infantil en tiempos de pandemia.
La infancia es esa primera etapa del desarrollo de todo ser humano que tiene mayor importancia debido a que es la base para el buen desarrollo de la adolescencia, la juventud, la adultez, hasta la vejez. Bien se dice que una primera infancia feliz es sinónimo de una etapa adulta feliz, ya que durante la infancia se empiezan a forjar las primeras raíces que componen la personalidad de cada individuo. Sin embargo, esta etapa y este buen desarrollo se han visto expuestos a un gran estímulo como lo es el uso de las TIC. Estas se han vuelto una herramienta esencial para cada uno de nosotros, ya que facilitan el contacto, proporcionan entretenimiento, hasta apoyan la parte educativa. Sin embargo, el uso indiscriminado de estas herramientas en infantes ha ido generando una serie de obstáculos en su desarrollo tanto físico, neurológico y filial. Gracias a diversos estudios, se pudo observar un gran retroceso en cuanto a aspectos cognitivos en niños de entre 6 a 12 años; hay argumentos que indican problemas de atención, despreocupación de profesores, disminución de la motivación, aumento de apatía hacia el aprendizaje, disminución de horarios a comparación de los que se tenían en clases presenciales, aumento de actividades en plantillas y disminución de la capacidad analítica y razonamiento; de igual forma, con menor frecuencia existe una disminución de la comunicación dentro del núcleo familiar, una sustitución del juego familiar por el juego digital individual, la pérdida de contacto con sus compañeros de clase, la pérdida del vínculo de profesores, así existiendo un nuevo concepto de enseñanza-aprendizaje.
Con esto, el COVID-19 y la pandemia han representado, por su gravedad y alcance, un reto global sin precedentes, es decir, han representado no solamente un daño a nivel salud física y mental en los niños, sino también a nivel educativo y socio-afectivo. Con esto, se determina que las TIC, a pesar de que forman parte de nuestras herramientas clave en nuestro aprendizaje, el mal uso de estos puede conllevar a un aislamiento tanto con el ambiente como con uno mismo. Además, esto ha ayudado a ver que una de las crisis mundiales como es el aprendizaje se agrave más, desde la parte de la carencia de destrezas en la parte de la enseñanza como en la parte de factores que puedan dañar el desarrollo principalmente cognitivo.