¡Feliz inicio de semana comunidad UNIVA! Hay un famoso refrán que dice: “Haz el bien, sin mirar a quien”. Y si es cierto que es una actitud cristiana pasar por este mundo haciendo el bien, como lo hizo Jesús, el Señor nos invita a ir más allá. Todos tenemos una tendencia natural a hacer el bien a quienes amamos, o quienes tenemos cerca o son afines a nuestro estilo de vida y podemos generar una dinámica de reciprocidad que puede llevarnos a condicionar nuestro actuar.
Por eso el Señor nos invita a hacer el bien a quienes no pueden de alguna manera ser recíprocos con nosotros, pues de este modo nuestro actuar será cada vez más semejante al de Dios que “hace salir el sol sobre malos y buenos”. Con esto no quiere decir que dejemos de hacer el bien a quienes pueden hacernos el bien, sino que procuremos poner más esfuerzo en hacerlo con quienes menos posibilidad tienen de regresar algo.
También con esto el Señor nos invita a hacer constantemente un examen de conciencia y meditar nuestras intenciones a la hora de realizar actos buenos, pues el corazón del hombre es engañoso y difícil de escrutar incluso para nosotros mismos. Pidámosle al Señor la pureza de corazón para hacer el bien sin doble intención y la sabiduría para identificar el bien verdadero en cada circunstancia.