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El contenido multimedia es un veneno que está desensibilizando a México

Enrique Reynoso Chávez · Estudiante de la Licenciatura en Criminología y Criminalística, UNIVA Guadalajara. Trabajo realizado en la asignatura de Sociología Criminal, bajo la asesoría del Mtro. Diego Santiago Carrillo Garibay.

 

Hoy en día vivimos en un mundo globalizado, donde todo tipo de contenido multimedia es divulgado constantemente gracias a las tecnologías de la información y la comunicación; esto ha provocado una serie de cambios en la sociedad, ya que nos han brindado acceso al mundo fuera de la comunidad donde vivimos y propiciado que conductas, eventos, tradiciones, música, imágenes o noticias que antes no llegaban a nosotros con tanta facilidad, que pasaban desapercibidas o que no les prestábamos importancia, se volvieran parte de nuestra vida.

Esta divulgación trajo consigo una gran cantidad de contenido violento, lo que, en mi opinión, es uno de los mayores problemas de estas tecnologías; puede ser bueno darse cuenta de los problemas relacionados con la violencia, sin embargo, muchas veces no se tiene cuidado con el tipo y frecuencia de divulgación. La gran cantidad de noticias, videos, información e imágenes que se comparten, propicia que estemos viendo, leyendo o escuchando cosas violentas y nos acostumbremos a ello, porque conforme algo se vuelve cada vez más común, más nos acostumbramos.

Por esto y otros motivos que comentaré más adelante, considero que se debe visibilizar y concientizar este problema, pero para lograrlo, es necesario partir primero de qué es la violencia, cuál es su relación con el ser humano y por qué tiene este impacto en nosotros.

 

El nacimiento de la violencia

La agresividad, según la Real Academia Española (RAE), es la “tendencia a actuar o a responder violentamente”. Es un error muy común que la gente tienda a relacionar como sinónimos a la agresividad con la violencia, cuando en verdad son cosas diferentes, la agresividad es un instinto nato que usamos para defendernos y que realizamos de forma natural, mientras que la violencia según la ONU, es el uso intencional de la fuerza contra uno mismo, una persona, grupo o comunidad (ONU, 2022). Tal vez por naturaleza seamos agresivos, pero al socializar podemos empezar a ser violentos, debido a sentimientos más complejos como la venganza, los celos, la envidia, el amor, etc.

El ser humano siempre ha disfrutado de la violencia, un claro ejemplo es que prohibimos que esclavos peleen a muerte, pero permitimos que 2 luchadores por propia voluntad peleen hasta la sangre, con un alto riesgo de sufrir heridas o incluso de morir.

El desarrollo del ser humano nos ha llevado a crear diversos tipos de violencia, que desde mi opinión, se debe a lo complejo de la sociedad; en el pasado, si alguien te robaba algo solo bastaba con defenderte para evitar que lo lograran o para recuperar lo que te robaron, pero hoy en día entran en juego una gran cantidad de factores como las leyes.

Actualmente, los diferentes tipos de violencia son tomados en cuenta por el Estado y la sociedad, creando la siguiente clasificación:

  • Física: son todas las agresiones que atentan contra el cuerpo de una persona.
  • Psicológica o emocional: es toda acción u omisión que implique un perjuicio en la salud psicológica o emocional.
  • Sexual: es la fuerza o la coacción física, psicológica o cualquier otro mecanismo que anule o limite o la voluntad personal.
  • Económica: ocurre cuando se utiliza el dinero como un factor para dominar o establecer relaciones de poder perjudiciales.
  • De género: son los actos violentos contra una persona debido a su sexo o preferencia sexual.

El Estado juega un papel muy importante en el control de la violencia, ya que al regular nuestra conducta mediante leyes, también establece los límites de la misma. El Estado debe seguir tomando las medidas necesarias para evitar que la violencia aumente.

 

Exposición a la violencia a los niños y adolescentes

Un estudio realizado en España por la revista Didáctica, Innovación y Multimedia (DIM), analizó las diferentes formas en que la violencia afecta a los jóvenes:

“Hemos de destacar que los contenidos violentos de los medios se veían a solas (nunca en presencia de los padres –madre o padre-) y en el ordenador de la propia habitación. De los 22 participantes, 17 contaban con móvil, consola y ordenador en su propia habitación. Algunas series o películas se veían en compañía de los padres y estos, no hacían ningún comentario e incluso se reían –se nos comentó en una ocasión- ante la violencia de los medios. Con la consola siempre se jugaba a solas en el propio cuarto, lejos de los padres y a lo sumo con un amigo (Ignasi de Bofarull y Miquel Àngel Comas 2016) ”

Después de analizar las respuestas de la encuesta, llegaron a la siguiente conclusión:

“Todo es ficción y no son necesarias las reflexiones éticas. La violencia divierte y (como el sexo o el humor) uno lo consume y luego se puede quedar tan “pancho”: no pasa nada. No hay que preocuparse. Un chico o una chica que ve mucha violencia no se volverá violento o violenta por ello. (Ignasi de Bofarull y Miquel Àngel Comas 2016).”

Esto da a entender que los jóvenes no reflexionan con base al contenido violento que ven, lo que es un gran problema, porque significa que para ellos es algo sin importancia, que ya es tan común que no necesitan reflexionar y lo que es peor, que aún cuando el joven no es violento es capaz de reconocer la existencia de otros que si lo son y de la necesidad de ponerse “chulos” para hacerse valer, pero ponerse “chulos” puede ser desde actuar como si no te afectara nada hasta responder con un mismo grado de violencia.

Tampoco podemos evitar el factor cultural, ya que una persona que vive en España va a estar menos expuesta a la violencia que una que vive en México. Por desgracia, nuestro país tiene una cultura que nos enseña a siempre estar alerta o más bien, a siempre tener miedo por un posible ladrón, incluso a muchos hombres y mujeres se les inculca desde niños que deben defenderse y atacar por si alguien les insulta o se les pone “al tiro”.

 

Violencia en prensa

En México, la cantidad de personas que leen el periódico está disminuyendo año con año. Según un estudio realizado por el INEGI en el año 2020, la cantidad de jóvenes alfabetos que leen paso de un 73,6% en el 2016 a un 65,7% en el 2020, según este mismo estudio, 27% lee por estudios o trabajo y el 25,5% leen por cultura general (INEGI, 2020).

Los periódicos con el paso del tiempo empezaron a incluir más variedad de noticias y anuncios, en un inicio esto no tiene nada de malo, pero en realidad esto provoca que a la hora de leer el periódico en la primera página se lean encabezados amarillistas, sexistas, machistas y sobre todo violentos, para llamar la atención de las personas mientras que la parte de atrás está llena de anuncios; un día puedes estar leyendo acerca de una fosa clandestina mientras que en la parte de atrás se están promocionando cazuelas, se venden departamentos o hay ofertas de empleo, ¿cómo esperan los periódicos que las noticias importantes sean tomadas con seriedad si están en la misma hoja que los anuncios?

Otro gran problema es que muchos negocios sitúan los periódicos en el mismo estante que las revistas de chismes, las revistas científicas o los cuentos, una vez más, ¿cómo esperan que un niño no se acostumbre a ver y leer cosas relacionadas con la violencia si para elegir un libro de colorear tienen que ir a una sección donde hay periódicos con encabezados que hablan de delitos, violencia o conflictos con el narcotráfico? En serio, ¿nadie se ha dado cuenta de que esto expone a los niños a la violencia?

 

Música

La música es una de las formas de expresión más antiguas, para la mayoría de la gente la música es solo música y no tiene ningún significado más allá de sus fines de entretenimiento, así que muchas personas no se preocupan por lo que dicen las letras y solo buscan que tenga un buen ritmo. Sin embargo, hoy por hoy, la música puede exponer una realidad, ser una crítica, contar una historia, manifestar ambiciones y hasta deseos. En el particular caso de México, la música se relaciona con la violencia en gran medida por los narcocorridos.

Es ampliamente sabido que la música ocupa un lugar muy importante en la vida adolescente debido a las múltiples funciones que desempeña, como por ejemplo: modificar el estado de ánimo, conformar aspectos relacionados con la identidad personal, establecer y fortalecer relaciones interpersonales, etc. Así que, si durante tu adolescencia escuchabas narcocorridos o música similar, lo más probable es que te haya afectado más de lo que te imaginas.

Hablar de los narcocorridos es relevante porque estos hacen apología del delito, pero ¿a qué nos referimos con esto? Según la RAE, apología es un “acto preparatorio del delito que consiste en la exposición, ante una concurrencia de personas o por cualquier medio de difusión, de ideas o doctrinas que ensalcen el crimen o enaltezcan a su autor, que solo es delictivo como forma de provocación y por su naturaleza y circunstancias constituye una incitación directa a cometer un delito (RAE, 2022).

Según el artículo 208 del Código Penal Federal “Al que provoque públicamente a cometer un delito, o haga la apología de éste o de algún vicio, se le aplicarán de diez a ciento ochenta jornadas de trabajo en favor de la comunidad, si el delito no se ejecutare; en caso contrario se aplicará al provocador la sanción que le corresponda por su participación en el delito cometido”.

La apología del delito en la música, especialmente a través de los narcocorridos, resalta y engrandece los supuestos beneficios de trabajar con este gremio delincuencial, logrando que la vida y obra de estos personajes sea vanagloriada, ya que según estas canciones, las personas dedicadas al narco gozan de poder, dinero, mujeres y todo lo que puedan llegar a anhelar; esta engañosa realidad puede provocar que jóvenes y niños se sientan atraídos por trabajar para la delincuencia organizada.

Desde hace años el gobierno ha estado tratando de enjuiciar a los cantantes que hacen apología del delito, uno de los casos más sonados lo protagonizó el cantante Gerardo Ortiz, cuando fue detenido en el aeropuerto Miguel Hidalgo de la ciudad de Guadalajara, tras una orden de aprehensión que lo responsabilizaba de este tipo de delito, en una de sus canciones.

 

Violencia y televisión

Según la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH, 2021) 70,4 millones de personas de seis años o más, son usuarias y 60.1% de la población que utilizó tecnologías de la información ven televisión abierta (INEGI, 2020).

Como vemos, la televisión sigue siendo un miembro más de las familias mexicanas, pero en mi opinión, es uno de los peores recursos, ya que la mayoría de películas y series disponibles nos acostumbran a la violencia; muchas veces, la utilizan incluso como recurso narrativo, esto por sí solo puede que no sea un gran problema, puesto que con buena educación y edad suficiente uno es capaz de separar la realidad de la ficción, sin embargo, la exposición a estos contenidos de un niño o un joven, sin la supervisión adecuada, puede que resulte en algo más grave.

La violencia en las series de televisión, películas y documentales ha llegado al punto en que deben ofrecer más violencia a petición y gusto de su audiencia, ya que debido a su insensibilización, la gente quiere ver cada vez más de lo mismo; un claro ejemplo de esto es Dahmer, una serie que habla sobre un asesino serial. Un rotundo éxito para la plataforma de streaming que orilló al papá de este tipo a pedir que retiraran la serie, por el grado de glorificación a la que estaban llevando a su hijo.

 

Las redes sociales y plataformas de interacción social

Se estima que los adolescentes pueden pasar hasta 9 horas diarias en línea; el 60% del tiempo lo pasan desde sus dispositivos móviles y al menos el 30% de estas horas, son destinadas para interactuar en redes sociales.

Es cierto que las redes trajeron una gran cantidad ventajas, pero al mismo acarrearon una considerable suma de inconvenientes. El anonimato que se puede tener en estos espacios virtuales, sumado a que físicamente puedes estar en cualquier lugar, provoca que las personas sientan más libertad para expresarse, pero también, más libertad para hacer cualquier cosa; contenidos de comedia, sátira y burla son de los más creados y consumidos.

Las burlas y bromas sobre temas de actualidad en las redes sociales los convertimos en un mero circo, para ciertas personas puede que esto no sea malo e interpreten las bromas como una forma de retratar y dar a conocer los problemas -y aunque en parte coincido con esto- creo que lo hemos llevado al extremo; cada vez hay más gente que en cuanto algo pasa empieza a bromear con ello, al grado de que las personas se enteran de las noticias a través del meme; se preocupan más por compartir su chiste en redes que en salvaguardarse, ayudar a los demás o entender bien qué pasó… en mi opinión, solo es una forma de evitar el confrontamiento con la realidad y aunque todavía no le restamos total importancia a sucesos en los que mueren miles de personas, sí que nuestro umbral de tolerancia está acostumbrado a cualquier pelea de bar, a que le peguen y roben a gente en las calles, en general, a sucesos donde nadie murió y a lo mucho, los heridos no nos quitan el sueño.

Sin duda alguna, la violencia lleva años siendo parte fundamental de la vida en sociedad y en la misma medida en que esta cambia y evoluciona, la violencia también lo ha hecho adoptando distintas formas.

El problema de esta insensibilización que se fomenta ante la violencia, no necesariamente hará que todos nos volvamos en asesinos sedientos de sangre o que te conviertas en una mala persona, pero aunque no te des cuenta, te impacta. Hace poco hubo una balacera afuera de mi casa que dejó un hoyo en nuestro portón, al platicar la adécdota con los demás, caí en cuenta de que lo estaba haciendo como si fuese un dato curioso, como algo divertido. Sin percatarme, le resté importancia porque la realidad es que a cada rato se escucha sobre otras balaceras en la ciudad pero, no debería ser algo común.

 

¿Qué podríamos hacer?

1.- Nuevas leyes que atiendan y regulen la divulgación de contenido violento en las plataformas multimedia. Esta primera propuesta consiste en crear nuevas políticas o leyes que, mediante protocolos y prohibiciones, regulen cualquier grado de violencia en los contenidos.

2.- Crear cursos de concientización ante el problema de la violencia. Hay que sensibilizar nuevamente a la gente, debemos poder darle la importancia necesaria a la eliminación de la violencia y compartir con los padres de familia nuevas herramientas para controlar el consumo multimedia de sus hijos.

3.- Reformar los sistemas de clasificación de contenido multimedia. La categorización del contenido debe ser más notoria y debería agregarse a cualquier tipo de contenido; siendo más visible, será más fácil cuidar el consumo digital de niños y adolescentes.

 

  

Referencias

  1. Santa, R. (2022, 5 julio). 91,2% de los hogares mexicanos tienen un TV en casa | TVyVideo. https://www.tvyvideo.com/2022070519775/noticias/empresas/91-2-de-los- hogares-mexicanos-tienen-un-tv-en-casa.html
  2. Geografía (Inegi), E. D. N. I. Y. (s. f.). Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2021. https://www.inegi.org.mx/programas/dutih/2021/
  3. Artículos Médicos. (s. f.). Clínica Hospital San Fernando. https://www.hospitalsanfernando.com/articulos-medicos/que-es-la- dopamina
  4. MONTAÑO ROZO, M. X. (2022, 22 junio). ¿Influye la música en la forma como nos comportamos? Revista Pesquisa Javeriana. https://www.javeriana.edu.co/pesquisa/influye-la-musica-en-la-forma-como- nos-comportamos/
  5. Ancajima, J. (2020, 14 agosto). Influencia de la música en los seres humanos. UDEP Hoy. https://www.udep.edu.pe/hoy/2020/08/influencia-de- la-musica-en-los-seres-humanos/
  6. (2022). Real Academia Españoala. https://dle.rae.es/agresividad?m=form
  7. Zambrano Arellano, M. A. (2021). La incidencia de contenidos sobre violencia física en medios de comunicación y la viralización entre jóvenes de 13 a 19 en el DMQ [Tesis de titulación]. Universidad de los Hemisferios. http://dspace.uhemisferios.edu.ec:8080/xmlui/bitstream/handle/123456789/ 1221/Trabajo%20de%20Titulación%20María%20Angélica%20Zambrano%2 0Arellano%20-%20- %20Facultad%20de%20Comunicación%20y%20Tecnologías%20de%20la %20Información%20%282%29.pdf?sequence=1&isAllowed=y
  8. Wartella, E. (2020). VIOLENCIA EN LA TELEVISIÓN NORTEAMERICANA [Ensayo]. https://felafacs.org/dialogos/pdf53/1.Wartella.pdf
  9. DE BOFARULL, Ignasi; COMAS, Miquel Àngel (2016). La violencia en los medios y su influencia en las cogniciones de niños y adolescentes. En Revista Didáctica, Innovación y Multimedia, núm. 34 <http://dimglobal.net/revista34.htm>
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