“Den al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios””
Reflexión:
Nada como un buen café para despertar el espíritu…
Jesús nos invita a cumplir con nuestras responsabilidades y que recordemos la escala de valores que tenemos para poderla ordenar y poner en primer lugar al Amor. No dejemos que ni el dinero ni nuestras propias comodidades tomen el lugar de Dios, porque, si nosotros le damos el lugar que se merece, lo restante tomará orden y armonía.
Dejemos a un lado la hipocresía y comencemos a pedirle a Jesús que nos de la gracia de vivir con profunda autenticidad, siendo lo que somos y buscando cada día lo que Dios quiere para nosotros