¡Feliz inicio de semana, comunidad UNIVA! La fe es una virtud teologal, un regalo de Dios que nos permite acoger a Jesús, la Palabra de Dios hecha carne. Los discípulos del Señor no logran interceder por el muchacho ni curarlo debido a su falta de fe, oración y ayuno. Aún tienen un camino por recorrer en su relación con el Padre celestial para hacer plenamente presente el Reino de Dios entre los hombres.
El padre del muchacho, movido por el amor, suplica a Jesús que lo cure. Sabe que tiene fe, pero también reconoce que aún le falta. Esta fe no proviene únicamente del esfuerzo o la intención humana de creer; es un don que se pide a Dios. Por eso, en este día, el Señor nos invita a pedirle que aumente nuestra fe. Sin embargo, para que nuestro corazón pueda ensancharse, también necesitamos tener disposición: un corazón abierto a la oración y al sacrificio.