Mtro. José Carlos García Álvarez ∙ Coordinación Académica de Ciencias Comerciales, UNIVA La Piedad
Corría el 2017, en una fecha que nunca pasa desapercibida en México, 19 de septiembre, ¿casualidad? ¿Destino? ¿Energía? Prácticamente, lo estábamos esperando y sucedió, un sismo vuelve a sacudir al país, lo vuelve a hacer estremecerse hasta sus entrañas, pero lo que estábamos por vivir lo haría aún más; un mexicano nunca deja solo a otro mexicano, por lo menos, en desgracia, con dolor recordemos un poco lo sucedido.
Miles de personas ayudando a otros miles, aun sin conocerlos, gente que ha dejado la seguridad propia, que expone su vida por la de otros, personas solidarias, personas dispuestas a no dormir, no comer y no rendirse por salvar la vida de un hermano, nunca mejor aplicado nuestro himno nacional: Mexicanos al grito de guerra […] Un soldado en cada hijo te dio, esto es México, esto es su gente, más allá de todos los problemas que como país vivimos, hoy como sociedad, demostramos que somos un pueblo de guerreros, de ingeniosos que encontrarán una solución a todo problema, que actuarán con rapidez ante la desgracia de un compatriota.
En aquel 2017, el mundo estuvo con México, ese respeto y simpatía que se ha ganado a lo largo del tiempo, a través de eventos deportivos, apoyos humanitarios, y la gracia de su gente, nos devolvió la ayuda que necesitábamos. Aquel 19 de septiembre, se nos olvidó el muro y rescatistas de la armada estadounidense apoyaban en las labores de rescate; nos olvidamos de religiones y personal israelí también buscaba vida en nuestros suelos. América, Europa, Asia, se unieron en pro de mi pueblo y eso me hace recordar que mi país, fue mucho más grande, fuerte y poderoso que 8 grados Richter.
Así de orgulloso y placentero es ser mexicano, ese es nuestro pueblo que siempre verá por sus hermanos en desgracia, esta es nuestra raza incomparable, este es el espíritu mexicano que hace que se infle el pecho y se enchine la piel, así de chingones somos.
En el 85 resurgimos desde lo más profundo, en 2017 lo volvimos a hacer, y ante cualquier eventualidad estoy seguro de que lo haremos como ninguno, porque hemos sobrevivido a nosotros mismos, porque sobrevivimos a desastres naturales y a políticos que han sido más peligrosos que eso, porque seguiremos luchando mientras exista esperanza, aun cuando esta parezca perdida.
No importa la fecha en la que leas esto, o el desastre natural que estemos viviendo en ese momento; siempre estará vigente y será una razón más para ser: orgullosamente mexicano.
