Jennifer Ibarra Zepeda · Estudiante del Bachillerato en Administración y Negocios, UNIVA Guadalajara
Espejo de la sociedad, herramienta de cambio, de cuestionamiento crítico, que aporta a los debates éticos, políticos y morales, estos son algunos de los beneficios de la literatura. Cada obra literaria tiene un valor que agregar a la sociedad, independientemente del planteamiento de la historia. No importa si es ficción, historia, autobiografía, romance o poesía.
Desde el punto de vista educativo y del desarrollo crítico del lector, la lectura de textos literarios no solo mejora las habilidades lingüísticas, de escritura y de comunicación, sino que también fomenta el pensamiento crítico. Estos textos desafían al lector a ir más allá de sus conocimientos previos, invitándolo a comparar y contrastar sus experiencias personales con las de su sociedad. Además, fomenta el debate de temas de relevancia social y personal; ricos y diversos en información y argumentos.
Aporta a la preservación cultural, pues conserva el patrimonio y las tradiciones, al transmitir historia, leyendas y formas de vivir de generaciones pasadas y actuales. Algo sumamente importante en esta era de globalización, donde los avances de la tecnología se están saliendo de las manos de la humanidad y si no se conserva lo preciado, no quedará nada que valorar.
Influyen en la generación de políticas, al sensibilizar en las obras literarias sobre temas específicos, como el cambio climático y las afectaciones en el medio ambiente, la justicia social o la salud mental. Siendo así, los políticos a menudo se ven influenciados por las obras que leen, viéndose reflejado en la creación de leyes.
Fomenta la empatía a través de vidas ajenas donde diálogos prescritos van guiando el camino del lector, enfrentándose a nuevas situaciones, donde abunda la diversidad cultural, la diferencia de perspectivas, retos de situaciones atemporales y contemporáneas a nuestra realidad, entre muchas otras cosas que nos enriquecen como seres humanos pensantes. Incentiva la creatividad e innovación además de cambio en las normas sociales al exponer a los lectores a distintas formas de escritura y mundos imaginarios, mundos que comparten similitud con la realidad e incluso llegan a pasar de ser letras a una realidad. Un arte que promueve una sociedad más inclusiva y comprensiva al exponer a las personas a diversas experiencias humanas y culturales.
La literatura ofrece una vía para la catarsis individual, permitiendo al lector expresar sus emociones de manera íntima y segura. Este proceso puede ser terapéutico, proporcionando consuelo a quienes enfrentan dificultades, buscan respuestas existenciales, o se sienten incomprendidos por no poder comparar su historia de vida con la de los demás.
También es una forma de liberar el estrés, creando un espacio para el crecimiento personal, la salud mental y emocional, y el empoderamiento individual. Esto es fundamental para llevar una vida plena y alcanzar el éxito.
La literatura es un espejo de la realidad, de lo material y de lo que podría llegar a ser. Captura y refleja sus complejidades, tensiones y cambios. Considera enfoques controvertidos desde la política, la economía, la cultura y sus interacciones con otras culturas, la evolución humana, hasta lo más particular, revelando verdades sobre la sociedad. Es un espacio donde los autores tienen la libertad de criticar injusticias, ser crudos y directos, y expresar ideologías o argumentos inimaginables o inaceptables, que pueden llegar a materializarse en la realidad.
