Mayela Delgado Mitre · Asistente de Educación Media Superior y estudiante de la Licenciatura en Administración de Empresas, UNIVA Guadalajara
La Doctrina Social de la Iglesia (DSI) es la enseñanza oficial de la Iglesia Católica para la construcción de un mundo mejor y más justo, cada vez más cercano al Reino de Dios, que busca proporcionar orientación moral y ética en el ámbito social y económico, es un marco que busca promover la dignidad humana, a través de sus principios como el bien común, la solidaridad y la subsidiariedad. La Doctrina Social de la Iglesia nos invita a reflexionar y actuar en concordancia con estos principios para construir un mundo más justo y fraterno.
Desde la perspectiva de la DSI se nos ofrecen argumentos sólidos para refutar los abusos tanto del capitalismo como del marxismo, que podemos comprender más al leer el documento de Puebla (1979) de la III Conferencia General del Episcopado Latinoamericano (CELAM) en donde se reconocen las limitaciones y los peligros que ambos sistemas económicos tienen al alejarse de los principios que la DSI busca fomentar para preservar y fomentar la dignidad humana. Tanto la DSI como el documento de la CELAM, nos proponen una visión equilibrada y ética en el ámbito social y económico, donde se respete la dignidad de cada persona, se busque el bien común y se evite la explotación y la exclusión. Al analizar estos argumentos, podemos encontrar elementos para una reflexión crítica y constructiva sobre los sistemas socioeconómicos y su impacto en la sociedad de la cual, hoy, estamos necesitados.
Sin embargo, es necesario que tomemos decisiones personales como comunitarias para la materialización de estas propuestas, como lo menciona Rodolfo García Cuevas en un texto sobre el libro La condición humana de Hannah Arendt; en su libro (2003) la libertad es un aspecto esencial de la condición humana y explora las influencias que pueden afectar la capacidad de las personas para decidir de manera objetiva. Según García, la libertad se realiza a través de la acción auténtica y la participación política. Sin embargo, nuestras decisiones están influidas por el contexto social y político, el pasado y la tradición, así como por la opinión pública. Estas influencias pueden limitar nuestra capacidad de tomar decisiones objetivas independientes. Comprender estas influencias nos invita a reflexionar críticamente sobre nuestras decisiones y buscar la autonomía y la objetividad en nuestros procesos de toma de decisiones. ¿Será necesario formarnos cada vez más como personas críticas para tomar decisiones de forma más libre y en pro de la integridad?
Es necesario considerar que tanto la Doctrina Social de la Iglesia, como el documento de Puebla de la CELAM, tienen un argumento en común que sigue muy vigente: luchar por la dignidad humana.
*Docente Asesor: Mtra. Rocío Mijangos Méndez · UNIVA campus Guadalajara y campus Online.
Referencias
CELAM (1979) Documento de Puebla. Recuperado de https://www.celam.org/documentos/Documento_Conclusivo_Puebla.pdf
García, C. R. (2003) Hannah Arendt. La Libertad condición humana. Graffylia: Revista de la Facultad de filosofía y letras. Nº2 pp. 205-209 recuperado de: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2150828
