
Jorge Luis Padilla Zamora · Jefe de Mercadotecnia y Comunicación Institucional, UNIVA La Piedad
Se vive con miedo porque no sabemos qué pasará en los siguientes años con la incursión y evolución desmedida de la Inteligencia Artificial (IA). Lamentablemente, estamos siendo informados por muchos creadores de contenido que nos brindan opiniones muy pobres y sin fundamentación teórica. La desinformación que esto provoca, suele propagarse peor que una epidemia; mal informando, asustando y predisponiendo a la sociedad con lo que hará la IA.
Si bien, se han dado a conocer muchas aplicaciones que tendrán IA, mayormente, se ha socializado información sobre cómo esta afectará directamente a muchas profesiones hasta el punto de hacerlas desaparecer, cuando deberíamos cambiar la postura y saber de qué forma es que nos puede ayudar a transformar nuestra sociedad. Todo cambio es necesario en la vida y como sociedad hemos atravesado momentos muy importantes en las 4 revoluciones industriales que llevamos hasta el momento (mecanización, electricidad, informática y digitalización) entendiendo que el cambio significa evolución.
El problema es, que como sociedad, jamás se nos ha educado para el cambio y desarrollamos miedo ante lo desconocido, síntoma de una limitada formación. Es mejor quedarse como estamos; más vale malo por conocido que bueno por conocer; si funciona no hay necesidad de cambiarlo, estas y muchas otras frases que he escuchado, solo nos muestran una pobre autocrítica a lo que hacemos y el miedo a implementar acciones para mejorar, el tiempo sigue su línea siempre y no espera por nosotros.
Entonces, la IA, es ¿amiga o enemiga?… puede ser lo que tú quieras que sea. Eso será. Si crees que vendrá a sustituirte en tu trabajo, te invito a que valores más quién eres y de qué eres capaz, porque la IA puede lograr dominar procesos, pero jamás podrá lograr el razonamiento humano que es la principal característica de nuestra especie. Tal vez, puede darte mil resultados basados en estadística y probabilidad mucho más rápido que cualquier ser humano. Sí. Es real. Pero, el sentido estrictamente moral, no puede reemplazarse por una máquina, porque la moral va más allá de la lógica, ve el sentido propio de la vida, vida que las máquinas no poseen, por tanto, es algo que no podría experimentar la IA.
¿Quieres que sea tu amiga?… Hazlo. Toma las principales herramientas con las que cuenta y potencializa tu trabajo, tu eficiencia, pero jamás dejes que la IA haga todo por ti. Porque si permites que resuelva la más mínima pregunta que tengas por el gran abanico de respuestas que te dará, entonces estarás cediendo el paso a que en ese escenario sí te reemplace.
He escuchado a docentes decir: Ahora con la IA los alumnos podrán entregar los trabajos más rápido… el problema no es que lo hagan, es que como docentes sigamos esperando la entrega de trabajos de la misma forma, es decir, que se nos entreguen ensayos llenos de contenido, pero vacíos en ideas. ¿Quieres usar la IA para facilitar tu trabajo docente?… No. No se trata de que sea más fácil para ti, sino de cómo profesionalizar más tus actividades; si permites que tu capacidad creativa, tu sentido de redacción y tus habilidades analíticas se atrofien por facilitar tu trabajo con la IA… entonces amigo mío, estás perdido ante esta nueva realidad.
Al final, al igual que todos los cambios importantes que ha habido en la historia, la IA no va a llegar únicamente para quitarle a la gente sus trabajos, ni para acabar con el mundo, pero sí a revolucionar una era digital en la que ya estamos inmersos. Seamos conscientes de que todo en la vida, no es ni suficientemente bueno, ni suficientemente malo… todo está en la postura que tomemos frente a los cambios que se ofrecen ante ti.
Entonces, ¿tú qué piensas?… La IA, ¿será amiga o enemiga?