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Líderes de opinión

Emprendimiento sostenible: Una ventaja competitiva por el bien común

Por Líderes de opinión, Voces Univa Sin comentarios

Mtra. Julia Patricia Samperio Casco • Docente UNIVA Plantel Guadalajara y Coordinadora del Centro de Competitividad y Emprendimiento Sostenible

Según Richard Branson, CEO de Virgin Group, muchos líderes de negocios se han dado cuenta de que todas las empresas deben volverse una fuerza para el bien.

Últimamente, nuestro mundo se ha vuelto un gran escenario para hablar de corresponsabilidades en materia social y ambiental y es que, no es casualidad que los medios se encuentren centrados en importantes reflexiones al respecto. Sin duda alguna, ha llegado el momento de proponer una convergencia entre gobierno, empresa, academia y organizaciones de la sociedad civil para sumar esfuerzos a favor del bienestar común. Y los grandes organismos internacionales, lo saben.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), en conjunto con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) han desarrollado la Agenda 2030, una agenda transformadora que pone la igualdad y dignidad de las personas en el centro y llama a cambiar nuestro estilo de desarrollo, respetando el medio ambiente (ONU, 2016) y para lograrlo, propone cumplir a nivel mundial los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que invitan a todos los sectores a mejorar el estado del mundo en el ámbito económico, social y ambiental a través del cumplimiento de metas muy concretas y ambiciosas antes del año 2030. Ejemplo de ellos son: hambre cero, fin de la pobreza, igualdad de género, energía asequible y no contaminante, educación de calidad, acción por el clima, entre otros (ONU, 2016).

El emprendimiento sostenible, gira en torno a basar la naturaleza de la idea de negocio en una de las metas de uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, de tal forma que, la razón de ser de la empresa tenga una fundamentación que no permita que hacer el bien sea una mera acción social esporádica y asistencialista, sino que, por el contrario, sea una herramienta que asegure que el modelo de negocio es original, innovador y necesariamente sustentable a nivel económico para beneficiar permanentemente a su entorno, ya que, al tener el factor del compromiso social y/o ambiental, dentro de su estructura, el empresario debe cuidar las formas y fondos para poder cumplirlo.

Según el Instituto del Fracaso (2014), en México, el 75% de las empresas no logran sobrevivir a los dos años de su creación; por ello, el emprendimiento sostenible, ayudará a las empresas a que el propósito económico no sea el único fin, sino que se complemente con una propuesta de valor que resuelva alguna problemática de la sociedad o del medio ambiente que se desprenda de los ODS, brindando así, una ventaja competitiva sostenible, dado que si el fin económico no ha sido lo suficientemente fuerte para lograr la permanencia de los emprendimientos en el mercado, tal vez, planear hacer bien con intención bajo un marco de referencia internacional como la ONU, dada la corresponsabilidad que esta estrategia conlleva, sí lo sea.

Para conocer más de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, consulta:

  • http://www.onu.org.mx/agenda-2030/
  • Instituto del Fracaso. (2014). El libro del fracaso. México: Offset Rebosan.
  • Organización de las Naciones Unidas (ONU) (2016). Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Una oportunidad para América Latina y el Caribe. Publicación de las Naciones Unidas. Santiago.

 

El Ateísmo ¿un estilo de creencia?

Por Líderes de opinión, Voces Univa Sin comentarios

Dra. María Cristina Martínez Arrona • Jefa de Universidad a Distancia

 

“Recuerda que en lo que crees dependerá mucho de lo que eres” (Noah Porter)

 

En el periódico El País, se desarrolló un debate de posturas ante lo que se considera es una persona atea: una forma de expresar su ser religioso y los que opinan que no necesariamente.

Para los que el ateísmo es una forma de ser religioso, consideran que las personas que no creen en Dios, ni en las religiones, proyectan su fe en sí mismos, en cosas, ideas o personas que les dan sentido; es su forma de relacionarse con lo trascendente. Esta postura afirma que las personas se re-ligan siempre a algo, por lo tanto, la religiosidad en un contexto de secularización, lo que se relaciona con lo sagrado se vierte en lo social.

Los que opinan que las creencias no tienen que ser religiosas, consideran que estas no sustituyen “una necesidad”; los seres humanos pueden sencillamente prescindir de lo religioso, sin tener que suplirlo con algo o alguien, -con actividades o aficiones-, y esto se constata en grandes masas de sociedades avanzadas. Se entiende la religión como creencias y prácticas que responden a un sentido moral trascendente, de ahí que ser religioso, merma el progreso de una sociedad de ciudadanos libres.

La realidad es que el número de ateos va en aumento, Global Index of Religion and Atheism (2012) describe que el 59% de la población en el mundo se considera religiosa, el 23% no religioso y un 13% se declara ateo convencido. Se encuestaron a 68 países para conocer su porcentaje de ateos y China es el que cuenta con el mayor número, el 67% de su población; le sigue Japón con un 29%. México tiene un 8% de ateos superando “a todos los países latinoamericanos” cuyo promedio es del 2-3% (Gallup International, 2017).

Para la cosmovisión católica, la dimensión religiosa o espiritual es constitutivo de la persona, llámese creyente, religioso, ateo, científico, etc. Einstein decía “creer es más fácil que pensar. He ahí la razón de que haya más creyentes”, postura comprensible, cuando se separa la razón de la fe, y estas siempre deben de ir de la mano (Fides et Ratio). Los Evangelios muestran ejemplos de fe en personas, creyentes y no creyentes, que se traducen en conductas profundamente humanas (Ejem. Mt. 8, 5ss).

El debate, considero, no se debe centrar en que postura tiene razón o cuál es mejor que otra, sino preguntarnos, tu creencia ¿te hace una persona más autónoma y libre? Tus opciones de vida ¿construyen una mejor sociedad? En tu relación con los otros ¿respetas a las personas que encuentran sentido y trascendencia en sus creencias, aunque sean diferentes a las tuyas? Acciones que, para el católico, son posibles gracias a su dimensión religiosa.

Publicado en El Seminario Arquidiocesano de Guadalajara del domingo, 6 de octubre de 2019.

Hacia una nueva Ley General de Ciencia, Tecnología e Innovación: Parte II

Por Líderes de opinión, Voces Univa Sin comentarios

Mtra. Lorena González González • Docente UNIVA Plantel Guadalajara

 

Para quienes me comentaron en la primera entrega, cuáles fueron los resultados y qué sigue:

En la anterior entrega nos enfocamos en la relevancia de adecuar la Ley de Ciencia y Tecnología y que por tal motivo la comisión de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Cámara de Diputados acordó, en su 6ta Reunión Ordinaria, la celebración de los “Foros Regionales Hacia una Nueva Ley General de Ciencia, Tecnología e Innovación” con la finalidad de escuchar y recabar opiniones de diferentes actores locales y regionales de los sectores académico, científico, legislativo, empresarial, social y público, acerca del mandato constitucional contenido en esa reforma sobre el quehacer científico y tecnológico en México; sumado a otro ejercicio realizado anteriormente Foros Estatales de Consulta 2019, organizado por el Foro Consultivo Científico y Tecnológico A.C. (consultar resultados); se emitió la propuesta de exposición de motivos del proyecto CONACYT 24-06-2019 PROYECTO DE LEY GENERAL DE CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN, el documento consta de 49 cuartillas (aún no se publica, y por haber sido parte de este ejercicio la hizo llegar la Diputada Federal – distrito 8 Jalisco para su análisis), que en lo general dice lo siguiente:

Al comparar la Ley de Ciencia y Tecnología vigente, con la propuesta se observa en principio su designación por LEY GENERAL DE CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN, además de la aparición de la ciencia en la Carta Magna como un derecho humano:

“En el momento en que entramos a la Carta Magna, adquirimos un peso diferente” opinó la coordinadora del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT), la doctora Julia Tagüeña Parga.

El presente proyecto de Ley General de Ciencia, Tecnología e Innovación contempla las bases de la política de Estado en cuanto a ciencia, desarrollo tecnológico, innovación, investigación y otras actividades conexas, así como del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, con una visión de largo plazo orientada al fortalecimiento de las capacidades de la comunidad académica, científica y tecnológica y a la protección de las diversas formas sociales del conocimiento, así como al impulso del desarrollo nacional integral y del bienestar social.

La propuesta parte del convencimiento de que el vínculo entre el desarrollo nacional y la ciencia pública debe ser estrecho y orientado a la construcción de una sociedad democrática que, consciente de sus problemas más apremiantes, decide afrontarlos particularmente desde lo público y con el concurso de los generadores del conocimiento científico, de quienes construyen las políticas públicas, del sector industrial y productivo; las comunidades y colectividades involucradas; procurando en todo momento la protección de las condiciones naturales de la vida social.

En armonía con el artículo 3 constitucional, el ordenamiento que se propone se alinea con los mandatos de que la educación debe basarse en el respeto irrestricto de la dignidad de las personas, tener un enfoque de derechos humanos, materializar la igualdad sustantiva, incluir la perspectiva de género, el conocimiento de las ciencias y humanidades, la tecnología, la innovación, el cuidado al medio ambiente y el respeto por la naturaleza, entre otros.

De esta exposición de motivos emanan 5 líneas generales, en las que basaré mi análisis respecto a si se consideraron los resultados de las mesas de consulta y su alcance:

Compromiso con la sociedad y con el ambiente

En esta línea se manifiestan las recomendaciones (propias en negritas y/o de los foros) en los siguientes apartados:

Una parte fundamental de la estrategia es la evaluación en términos cualitativos de los apoyos que prevé esta ley, lo cual permitirá desestimular la práctica de privilegiar la producción de conocimiento científico en términos de la cantidad de las publicaciones y no de su calidad y utilidad social.

Pero, los sentidos de esta política también se relacionan con el crecimiento económico, la consolidación de la independencia tecnológica, el impulso a la incidencia en escenarios internacionales, el fomento de la inversión del sector privado, la promoción de la certificación tecnológica de las empresas, la consolidación de programas y proyectos de cooperación internacional, así como con los intercambios propositivos de alto nivel global.

En materia de innovación, la propuesta de ley considera vital su orientación a impulsar el crecimiento del país, el mejoramiento de las condiciones laborales de la población y el desarrollo de fuerzas productivas nacionales, contribuyendo de esta manera al desarrollo integral de la Nación y al bienestar social.

Respecto a lo descrito en lo anterior, se aprecia que si se consideró evaluar no sólo indicadores cuantitativos como número de publicaciones, convenios de colaboración, proyectos vinculados con la industria, número de patentes y otras figuras de la propiedad industrial, entre otros indicadores, como también lo fueron aspectos cualitativos con impacto social pertinente que contribuyan al desarrollo económico y al bienestar social (enfatizado en mi anterior entrega); estos indicadores son más complejos y actualmente en proceso de precisar, además su medición debe realizarse a mediano y largo plazo, ya que su manifestación no se observa en el corto plazo.

Y por último, la certificación tecnológica de las empresas necesaria para que estas sean productivas, competitivas y rentables, estas certificaciones también aplica a los egresados de las universidades quienes contribuirán a lograrlo.

Por espacio abordaré en la siguiente entrega las 4 líneas faltantes, si es de su interés.

Entorno global, responsabilidad “glocal”

Por Líderes de opinión, Voces Univa Sin comentarios

Mtro. José Luis Ríos Rodríguez • Coordinador de Desarrollo Integral UNIVA Plantel Vallarta

 

Puede pensarse que siempre hemos vivido en un sistema como el actual, y que sería inimaginable concebirlo de una manera diferente de cómo lo vemos ahora; sin embargo, apenas estamos alcanzando los treinta años del inicio de ese período de la globalización, que marcará el parteaguas de ese bum tecnológico y que ha revolucionado la vida de los pueblos a nivel mundial.

Hemos escuchado que “el hombre nunca antes ha estado más comunicado, pero al mismo tiempo es cuando más aislado se ha encontrado”; pero también, es cuando ha alcanzado un desarrollo que cada día lo encamina a realizar nuevos descubrimientos y los avances más sorprendentes con pasos agigantados.

Este corto tiempo nos ha enseñado que, si hemos de continuar con un consumo desenfrenado, una actitud individualista, un rechazo de lo social/comunitario, un desinterés de la dignidad humana y de los derechos de las personas, pero sobre todo perder de vista el rumbo y la dirección de nuestras vidas; estamos en camino de nuestra propia destrucción.

Nada parece hacernos reaccionar, y los pocos esfuerzos que hacen algunos, apenas si alcanzan a ser mínimas luces que brillan en una inmensa oscuridad; sin embargo, todavía estamos a tiempo de hacer con nuestra vida un cambio y con nuestra actitud un aliciente para todo el que esté a nuestro alrededor. Los grandes problemas que ahora están aquejando a la humanidad sólo serán solucionados en la medida en que dejemos el egoísmo a un lado, convirtamos el desinterés en participación y nuestra incredulidad en fe.

Debemos ser verdaderos promotores de cambio, pero no sólo de una manera romántica que muchas veces nos lleva a la inacción; tampoco como eruditos y estudiosos que al final nos lleva a dar ideas sin materializarlas o como soberbios gerentes que sólo nos esmeramos en dar las órdenes sin saber cómo cumplirlas.

Tenemos que retomar nuevamente el rumbo y empezar a generar el cambio no sólo haciendo, sino, siendo la diferencia, transformando la incertidumbre en esperanza, convenciendo a los demás de que, juntos podemos lograrlo, siendo este el único camino que debemos seguir para juntos, lograr revertir los efectos de unas causas que sólo nosotros podemos cambiar, finalmente será está nuestra responsabilidad local.

Vivir en el presente

Por Líderes de opinión, Voces Univa Sin comentarios

Mtro. Jorge Iván García Morando, Coordinador de Proyectos Sociales y Religiosos • Plantel Guadalajara

 

En el momento en que expresamos ¡vive el presente! No nos referimos a un simple sentido de vivir el momento como efímero o fugaz, como aquello que definió a la posmodernidad, sino como aquella acción que tiene que ver con el asumir nuestro estado de conciencia y disposición por vivir en la realidad en la que nos encontramos. De ninguna manera se trata de olvidar el pasado y dejar el futuro, más bien, consiste en insertarse en la realidad presente, es decir, vivir cada instante con presencia del presente en tanto que implica tener una capacidad de adaptarse a la realidad. No se confunda con el “acostumbrarse” de la realidad, puesto que nadie debería de acostumbrarse a la violencia, al maltrato, a la deshonestidad, a la infidelidad, a la calumnia, a la corrupción y a las condiciones que denigren a la dignidad humana. Es por ello que el vivir el presente con presencia significa, haberse dejado conmocionar por dicha realidad para emprender una serie de acciones que ayudaran a transformar nuestra condición humana global, porque a partir de esta conciencia del vivir, podemos afrontar el instante del presente desde otro enfoque y con nuevas estrategias, por un lado, tomamos conciencia de nuestro entorno y, por el otro, delimitamos el presente.

Conciencia y delimitación del presente son las dos acciones que el hombre pone en juego a su personalidad: puesto que de ello depende el cómo se van afrontar las condiciones de la realidad; de ello depende el asumir el sentido de responsabilidad y compromiso con lo que se vive y con quien se vive; de ello depende el sentido de felicidad con el que se quiera vivir, puesto que basta un instante del presente, para que esto denote una eternidad. Recordemos el evangelio de Marcos 9, 2-10 “En aquel tiempo, Jesús tomó aparte a Pedro, a Santiago y a Juan, subió con ellos a un monte alto y se transfiguró en su presencia…Después se les aparecieron Elías y Moisés, conversando con Jesús. Entonces Pedro le dijo a Jesús: <<Maestro, ¡qué a gusto estamos aquí! Hagamos tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías>>” donde el instante del vivir el presente se torna la eternidad, dado que el escuchar a Cristo es, asumir la lógica de su ministerio pascual, ponerse en camino con Él. Este instante presente o este vivir el presente con presencia, es lo que les significó a los discípulos que, en vez de quedarse en lo sublime de la experiencia, Jesús les invita a seguir su camino y a estar dispuestos a <<perder la propia vida>> (cf. Mc 8, 35) por aquel a quién se ama. De igual manera, quisiera recordar un fragmento del poema Carpe diem atribuido a Walt Whitman:

No dejes que termine sin haber crecido un poco,

sin haber sido un poco más feliz,

sin haber alimentado tus sueños.

No te dejes vencer por el desaliento.

No permitas que nadie

te quite el derecho de

expresarte que es casi un deber.

No abandones tus ansias de hacer de tu vida

algo extraordinario…

No dejes de creer que las palabras, la risa y la poesía

sí pueden cambiar el mundo…

Somos seres, humanos, llenos de pasión.

La vida es desierto y también es oasis.

Nos derriba, nos lastima, nos convierte en

protagonistas de nuestra propia historia…

Pero no dejes nunca de soñar,

porque sólo a través de sus sueños

puede ser libre el hombre.

No caigas en el peor error, el silencio.

La mayoría vive en un silencio espantoso.

No te resignes…

No traiciones tus creencias. Todos necesitamos

aceptación, pero no podemos remar en

contra de nosotros mismos.

Eso transforma la vida en un infierno.

Disfruta el pánico que provoca tener

la vida por delante…

Vívela intensamente,

sin mediocridades.

Piensa que en tí está el futuro y en

enfrentar tu tarea con orgullo, impulso

y sin miedo.

Aprende de quienes pueden enseñarte…

No permitas que la vida

te pase por encima

sin que la vivas…”

 

Publicado en El Semanario Arquidiocesano de Guadalajara del domingo 29 septiembre de 2019