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Desenmascarando mi contaminación

By 5 septiembre, 2024septiembre 24th, 2024Líderes Universitarios, Voces UNIVA

Andrea Itzel Medina Enríquez · Estudiante de bachillerato, UNIVA Puerto Vallarta 

En lo más profundo de la tierra, existen tres capas que forman parte de un complejo sistema compuesto por diversos elementos. La capa superior está constituida por arena, arcilla, agua y aire. Aquí viven algunos animales y crecen las raíces, plantas y vegetales. La capa intermedia suele contener piedras, aire, arcilla y algo de agua; es una superficie de gran tamaño donde algunas raíces se aferran. Finalmente, la capa inferior se encuentra en lo más profundo, formada por rocas. 

Quiero pensar que ya me conoces, porque dicen por ahí que soy esencial para el mundo, cubriendo la mayor parte de él y ayudando a que no desaparezca. Soy el suelo, el soporte de antiguos bosques, praderas verdes y campos de cultivo. Hoy quiero contar mi historia, para todos los que aún no conocen mi dolor y desesperación por lo que soy. 

Aunque por la mano irresponsable del ser humano mi función en el ecosistema ha sido desacreditada, debo decir que ya me he acostumbrado, pues durante décadas he sido sometido a químicos tóxicos, residuos y gases contaminantes. Mis capas más profundas son desconocidas para muchos, pero con el tiempo, el veneno y los fertilizantes filtrarán a través de mi ser. 

Siento cómo mi estructura se debilita, cómo mis nutrientes esenciales son reemplazados por sustancias nocivas, cómo mis habitantes más pequeños luchan por sobrevivir en un entorno hostil. Pero, sobre todo, siento cómo los pesticidas envenenan y matan las plantas que intentan enraizar en mí, cómo los desechos industriales se extienden sin piedad, contaminando mis aguas subterráneas y dejando un rastro de toxicidad. 

Bajo tus pies se oculta el peligro, ya que en mí se encuentran los alimentos que consumes, el agua que bebes y el aire que respiras. Al contaminarme, no puedo filtrar ni amortiguar el daño que estos contaminantes causan. 

He escuchado que los científicos son capaces de reconocer las heridas que me provocan, pero al intentar identificarlas muchas veces fallan, liberando nuevos contaminantes que aceleran mi destrucción. 

El ser humano que causa mi destrucción sigue su camino. Con su paso, el de los animales y los vehículos, elimina mis poros y huecos, haciendo desaparecer la flora y la fauna. Crecerán las ciudades y los pueblos que contaminarán mis suelos. Por eso, hoy te hablo para que entiendas cómo, tarde o temprano, esto nos afectará a todos. 

Como ya sabrás, la urbanización ha sellado gran parte de mi superficie, cubriéndola de concreto y asfalto, complicando mi respiración y la acumulación de acuíferos subterráneos. Los residuos domésticos, a menudo mal gestionados, también se han sumado a la larga lista de contaminantes que me dañan. 

A medida que la población crece, la cantidad de basura y desechos no biodegradables me transforma, me hiere y me satura, sin darme la oportunidad de absorber o neutralizar esos desechos y, claramente, sin poder cuidarme. 

Otra de las causas de mi sufrimiento es la deforestación, que provoca la pérdida de mi capa fértil y agrava la erosión. Sin los árboles y plantas que me protegen, estoy expuesto a perder agua y nutrientes. Esto no solo reduce mi capacidad para sustentar la vida vegetal, sino que también contribuye al cambio climático, pues menos vegetación significa menos oxigenación. 

La minería es otra actividad que deja profundas cicatrices en mi corazón. La extracción de minerales y metales no solo implica la remoción de tierra y roca en grandes cantidades, sino que también genera desechos tóxicos que complican mi existencia. 

He escuchado que algunos dicen: «No pasa nada, no tiene importancia», pero si se marcara la diferencia, una transformación podría ocurrir. Entre todos, podemos comunicar, proteger, ayudar y mejorar mi calidad. Evita las quemas, el pisoteo excesivo, no deseches aguas contaminadas, fomenta la diversidad de cultivos, planta árboles y evita la deforestación. Es hora de que el ser humano haga un cambio, recuerda que no es solo por mí, es por la calidad de vida que quieres para ti. 

Hoy te cuento mi historia no solo para compartir mi dolor, sino para advertirte del futuro que nos espera. Es hora de actuar, de reconocer mi valor y de trabajar juntos por un mundo mejor. Es hora de asegurar a las criaturas que dependen de mí una tierra fértil y saludable. 

Basta de ignorar la realidad, ¿no entienden que sin mí no estarían aquí? 

Mis gritos, lamentos, quejas y ruegos, ¿para qué han servido? Siempre he tratado de ofrecer los mejores alimentos, de mantener el equilibrio de los ecosistemas, de proteger las aguas subterráneas y superficiales. ¿Todo para qué? A este ritmo, pronto no podré satisfacer las necesidades futuras, y todos se preguntarán: «¿Por qué no hicimos nada a tiempo?». 

La educación y la gestión preventiva son decisiones afirmativas hacia la solución. Será necesario que el modelo productivo e industrial actual cambie, limitando prácticas dañinas. Es posible que algunos no cambien de opinión, pero ¿quién les garantizará su bienestar futuro? 

De forma resumida, quiero dejar algunas soluciones a mis problemas para que en el futuro pueda contar una historia diferente. Reduzcan los químicos tóxicos en la agricultura, restauren la vegetación mediante la reforestación, gestionen adecuadamente los residuos domésticos, industriales y agrícolas, fomenten la investigación, y, sobre todo, eduquen y conciencien sobre mi importancia y las consecuencias de la contaminación. 

Soy el suelo, el fundamento de la vida, y con tu ayuda, puedo seguir sosteniendo a las próximas generaciones. Juntos podemos trabajar para reducir la contaminación, restaurar mi salud y crear un mundo sostenible para todos los seres vivos. 

Bibliografía 

La trinchera reciclados. (s.f.). ¿Cómo se produce la contaminación del suelo? Obtenido de https://recicladoslatrinchera.com/contaminacion-del-suelo/#:~:text=La%20contaminación%20del%20suelo%20es,indirecta%20de%20los%20seres%20humanos. 

CORTOLIMA. (9 de julio de 2015). COMO CONSERVAR EL SUELO, UN SOPORTE DE VIDA . Obtenido de https://www.cortolima.gov.co/sala-de-prensa/noticias/1683-como-conservar-el-suelo-un-soporte-de-vida 

Díaz, G. (16 de mayo de 2022). CONTAMINACIÓN DEL SUELO: CAUSAS, EFECTOS Y SOLUCIONES . Obtenido de https://familiesforsdgs.org/contaminacion-del-suelo/ 

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Gobierno de México. (5 de diciembre de 2018). Contaminación del suelo, un peligro que acecha bajo nuestros pies. Obtenido de www.gob.mx: https://www.gob.mx/semarnat/es/articulos/contaminacion-del-suelo-un-peligro-que-acecha-bajo-nuestros-pies?idiom=es 

Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia Dirección electrónica. (http://www.ideam.gov.co/web/siac/suelo#:~:text=El%20suelo%20es%20un%20componente,la%20sociedad%20y%20el%20planeta.). ideam.gov.co. 

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