
Blanca Estela Casián Sahagún · Egresada en la Licenciatura de Filosofía.
“Todos nos preguntamos de dónde venimos, cuál es nuestro origen. Pero existen casos especiales entrelazados de incógnitas y corrupción, que han dado lugar a esta historia”.
Había una vez, en un lugar muy lejano, un bosque apartado del mundo, lleno de misteriosas leyendas y criaturas místicas, valles y escenarios mágicos. En este bosque, dentro de un claro, había una pequeña villa. Allí vivía una joven mujer que acababa de concebir a su hija, su querida hija Rose. Una niña de cabellos dorados como su madre y piel tan blanca como la nieve como su padre. Era tan bella que cualquiera que la mirara podría arrebatársela de sus brazos.
Desde el momento en que su madre la vio, se prometió a sí misma cuidarla más allá de cualquier cosa y mantenerse a su lado para siempre…
Pero una noche de luna llena, cuando parecía que los dragones dormían en su eterno sueño, despertaron y volaron hacia el lago de aguas cristalinas. Desde una pequeña choza, en las afueras de un poblado, una luz dorada les llamaba desde lejos, guiándolos hacia allí. Ellos llegaron en silencio y, en una pequeña cuna hecha con trozos de paja, encontraron a una niña tan linda que cualquiera que la viera quisiera llevársela.
Mientras los padres de Rose dormían, los dragones intentaron entrar por la ventana, pero no era posible debido a sus enormes tamaños. Entonces decidieron acudir a una hechicera que los haría pequeños, pero manteniendo su increíble fuerza. Sin dudarlo ni un segundo, regresaron a aquella choza donde la luz era aún más brillante. Los cabellos dorados de la niña destellaban sin parar bajo la luz de la luna. Ya pronto amanecería cuando los dragones se llevaron a la niña dormida hacia sus cuevas.
Había algo que los dragones habían olvidado mencionar: no era la primera vez que se llevaban algo que no les pertenecía.
Dejaron a la niña en la cueva, con uno de los dragones cuidándola. Una vez a solas con ella, se dieron cuenta de que la niña no era una niña común. El simple hecho de su presencia hacía que su salud y habilidades mejoraran, por lo que decidieron quedársela.
Algunos de los dragones fueron de nuevo con la hechicera, pero esta vez por algo diferente: una poción que los convertiría en humanos para que la niña creciera sin sospechas. Dos de los cinco dragones se encargarían de cuidarla y serían sus supuestos padres mientras ella crecía, ya que podrían obtener beneficios de ella.
Y así fue. La niña creció; ya no era una bebé, era una niña que no iba a la escuela, que no iba a la tienda, que no iba al parque, que no salía de su casa. Sus padres no la dejaban salir, pero ella los quería mucho y nunca había dudado de que en realidad no eran sus verdaderos padres, pues ese “amor” condicionado, era el único amor que ella conocía.
Hasta que un día, los dragones (es decir, “sus padres”) decidieron ir de viaje y la dejaron sola en la cueva. Ella siempre había querido salir y conocer el mundo a su alrededor, conocer a más niños, conocer la vida fuera de la cueva. Así que, cuando vio que nadie la vigilaba y que todos se habían ido, decidió salir. Prepararía su mochila con algunas cosas necesarias, pero la única mochila de la casa estaba sobre un estante muy alto en el cuarto de sus padres. Tomó una silla y comenzó a escalar hasta la cima del mueble. De repente, el mueble comenzó a caerse hacia adelante derrapando sobre la cama. Ella trató de levantarlo, pero no pudo.
Entonces, de dentro del mueble, cayó una pequeña carta, o más bien una pequeña nota:
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Para: Elvis Llama y Mary Flama
En caso de querer revertir el hechizo, digan:
«Aeternum Veritas, Dracones Revertitur.»
Si no funciona, vengan a mi choza y yo les ayudaré a regresarlos a su forma dragón. Por cierto, ¿cómo encontraron a una niña en medio del bosque? Eso me dijo el ogro, me suena que no sucedió así. ¿Volvieron a llevarse niños? No me sorprende. Pero en algún futuro, ¿no le piensan decir?
Bueno, no me meteré más. Gracias, y por cualquier cosa, vengan a la choza de esta vieja anciana.
«Gracias» de Pancracia Caldero.
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Rose se quedó helada, sabiendo que bien podría ser ella. Salió sin más remedio que buscar a la bruja y descubrir lo sucedido.
Su corazón se partía al descubrir que toda su vida había sido engañada por sus “padres”.
Trató de encontrar a la bruja, pero al parecer ya había fallecido, así que se fue adentrando en lo profundo del bosque, estaba perdida y más sola que nunca y a la vez queriendo encontrar a sus verdaderos padres.
Y justo fue cuando comenzó a ver algunos dragones volar en el cielo, ella ya conocía la historia y no quería volver a aquella fría y aburrida vida, entonces decidió esconderse en un arbusto para no ser vista, de seguro ellos ya se habían dado cuenta de su ausencia.
La noche llegaba y sabía que tenía una desventaja por la oscuridad, y era su glamuroso cabello que deslumbraba hasta a la estrella más brillante.
Cuando el sol comenzó a ocultarse, buscaba desesperadamente un lugar para esconder su cabello, a lo lejos encontró una muy pequeña y sencilla choza, donde lucía cálido. Al llegar, tocó la puerta, abrió una mujer con un cabello dorado tan brillante como el sol y al ver a Rose su expresión fue la de una madre que recupera a su querida hija y la de Rose, como una hija que había encontrado el camino de vuelta a casa.
-¿Quién eres y de dónde vienes?, le dijo la mujer.
Rose, comenzó a contarle la historia, la mujer lloró sin cesar y le habló a su marido, ambos lloraron abrazándola y de pronto ella comprendió lo que sucedía. La pareja le contó su experiencia y desde ese día Rose comenzó a vivir con ellos. Un día uno de los dragones tocó la puerta de esa casa, la niña abrió y se quedó helada, la madre al ver dicha escena, pronunció unas palabras extrañas: “iustitia nunc fiat”, y al instante, el dragón quedó convertido en roca, vaya que había cosas de las que hablar y que explicar en una vida tan larga y feliz como la que tuvieron aquellos tres en aquella choza en medio del bosque.
FIN
“Rosângela Serra Paraná, fue adoptada en los años sesenta en Brasil de manera ilegal, actualmente busca a sus padres biológicos y lidia con nuevas incertidumbres de vida”.
Referencias:
Reina, E. (2022, 4 mayo). Los desconocidos casos de bebés y niños secuestrados durante el régimen militar de Brasil. BBC News Mundo. https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-61239241